En la frontera de Texas y México, los primeros vaqueros americanos o cowboys, cocinaban la carne, las verduras y el pan de maíz sobre brasas calientes de madera. Esta receta de pan de maíz casero, se remonta a aquellos tiempos. Tradicionalmente este pan se cocina en un sartén de hierro fundido, quedando con una textura suave y esponjosa y con un delicioso sabor saladito (no dulce), ideal para acompañar sopas y estofados.
2 tazas
de Harina de Trigo GOYA®, o harina para todo uso
2 cdas.
de azúcar
1 cda.
más 1 cucharadita de polvo de hornear
2 tazas
de suero de leche
½ taza
de Aceite de Maíz GOYA®
2
huevos batidos
1 lata (15.5 oz.)
de Maíz Tierno Entero GOYA®, escurridos y enjuagados, o 1 ½ tazas de Maíz Tierno Entero GOYA® Congelado, (descongelar)
2 cdas.
de mantequilla
Paso 1
Caliente el horno a 425 °F. En un tazón mediano y usando una batidora, bata la harina de maíz, la harina de trigo, el azúcar, el polvo de hornear y el Adobo. Agregue el suero de leche, el aceite de maíz, los huevos y siga batiendo hasta que estén bien mezclados. Usando una espátula o cuchara de madera, mezcle el maíz y deje a un lado.
Paso 2
Caliente una olla de hierro fundido de 12" o sartén antiadherente a fuego medio-alto. Luego añada la mantequilla y deje hasta que se derrita y haga espuma. Vierta la masa reservada y traslade la sartén al horno. Hornee hasta que esté dorado y al insertar un cuchillo en el centro del sartén salga limpio, aproximadamente por 25 minutos. Sirva caliente o a temperatura ambiente.
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