Este delicioso plato familiar es un favorito entre las familias puertorriqueñas, además es muy fácil de preparar. El secreto está en el adobo: antes de freír las chuletas a la perfección, hay que bañarlas en una mezcla sencilla a base de aceite de oliva, vinagre y especias. Una vez listas, estas chuletas de cerdo jugosas y exquisitamente sazonadas se acompañan con arroz blanco y las deliciosas Habichuelas Rosadas Guisadas GOYA®, listas para servir. ¡Te garantizamos que esta deliciosa cena le encantara a toda la familia!
4
chuletas de cerdo, deshuesadas en cortes de ¾ de pulgada (1 lb y cuarto aproximadamente)
1 cda.
de Vinagre Blanco GOYA®
1 cdta.
de Ajo Picado GOYA®
½ cdta.
de Pimienta Negra GOYA®
¼ cdta.
de Hojas de Orégano GOYA®
Aceite de Maíz GOYA®, para freír
2 tazas
de Arroz de Grano Mediano GOYA®, preparado
1 lata (15.5 oz.)
de Habichuelas Rosadas Guisadas GOYA®, calentadas siguiendo las instrucciones de la lata
Paso 1
Poner las chuletas de cerdo en un recipiente que no sea de aluminio. Añadir el aceite de oliva, el vinagre, el Adobo, el ajo, la pimienta negra y el orégano. Untar las especias en la carne con las manos. Cubrir y dejar en el refrigerador. Dejar adobando por 2 horas mínimo, o hasta 48 horas. Antes de cocinar las chuletas de cerdo se deben dejar a temperatura ambiente por 30 minutos.
Paso 2
Poner 1 pulgada y media de aceite de maíz en un sartén grande y profundo. Calentar el aceite a fuego medio-alto hasta que se caliente, sin dejar humear. Añadir las chuletas de cerdo. Freír y dar la vuelta una vez, hasta que queden doradas por ambos lados y bien hechas (la temperatura interna debe ser de 150°F), por unos 8 a 10 minutos en total. Poner las chuletas en un plato cubierto con papel de cocina usando unas pinzas de parrilla o de cocinar.
Paso 3
Servir las chuletas con arroz blanco y las habichuelas rosadas guisadas, para una cena completa.
Mayra Ramsamy
Excelente